X


[ Pobierz całość w formacie PDF ]

fuerza.
FILOCLE�N.-�Qu� haces?
BDELICLE�N.-�Qu� hago? Llevarte adentro. De otro modo, no va a haber
testigos suficientes para todos los que te demanden.
FILOCLE�N.-Estando un d�a Esopo entre los d�lficos...
BDELICLE�N.-Me importa un bledo.
FILOCLE�N.-... le acusaron de haber robado un vaso
en el templo de Apolo; entonces �l contó cómo en cierta ocasión el escarabajo...
BDELICLEóN.-(Llev�ndose a su padre hacia el interior.) Voy a aplastarte
!palabra! a ti y a tus escarabajos.
EL CORO.-Envidio tu felicidad, anciano. !Qu� cambio en su �spera existencial
Siguiendo prudentes consejos, vas a vivir entre placeres y delicias. Quiz� los
desatiendas, porque es dif�cil modificar el car�cter que se tuvo desde la cuna. Aunque
fueron muchos los que lo consiguieron. !Cu�ntas alabanzas no se atraer�, por ello en mi
opinión y en la de los sabios, el hijo de Filocleón, tan discreto y cari�oso con su padre!
Jam�s he visto un joven tan comedido, de tan amables costumbres. Ninguno me ha
regocijado como �l. En todas las respuestas que daba a su padre resplandec�a la razón y
el deseo de inspirarle m�s decorosas aficiones.
-29-
UN SERVIDOR.-(Saliendo de la casa.) �Por Dionysos! Sin duda alg�n dios ha
revuelto y embrollado nuestra casa. El viejo, despu�s de beber y de o�r largo rato la
flauta, ebrio de placer, repite toda la noche las antiguas danzas que Tespis hac�a ejecutar
a sus coros. Pretende demostrar, bailando incesantemente, que los tr�gicos modernos
son todos unos perfectos imb�ciles.
FILOCLE�N.-(Saliendo de la casa acompa�ado de su hijo.) �Qui�n ha osado
sentarse en los umbrales de esta casa?
EL SERVIDOR.-�Vaya! Ah� est� esa calamidad.
FILOCLE�N.-Apartad las vallas, que va a empezar el baile...
EL SERVIDOR.-La locura, querr�s decir...
FILOCLE�N.-Ese �mpetu que pliega mis costillas. �Cómo mugen mis narices!
�Cómo suenan mis v�rtebras!...
EL SERVIDOR.-Tómate una porción de el�boro...
FILOCLE�N.-Fr�nico se encoge como un gallo...
EL SERVIDOR.-Van a lloverte piedras.
FILOCLE�N.-Alza su pierna hasta tocar el cielo.
EL SERVIDOR.-�Eh!, mira dónde pisas.
FILOCLE�N.-Mira cómo las articulaciones de mis caderas se mueven con
facilidad. �Qu� bien juegan!
EL SERVIDOR.-Nada de eso; lo que pareces es un verdadero loco.
FILOCLE�N.-Ahora desaf�o a todos mis rivales. Si hay alg�n artista que se
precie de danzar bien, que venga por ac� a competir conmigo. �Lo hay o no?
EL SERVIDOR.-(Designando a un danzante enano disfrazado de cangrejo.) No
hay m�s que uno: �ste.
FILOCLE�N.-�Y qui�n es ese pobre desgraciado?
EL SERVIDOR.-Un hijo de Carcino86, el menor.
FILOCLE�N.-No tengo con �l ni para un diente. Lo aplastar� bajo una buena
danza de pu�etazos; no tiene el menor sentido del ritmo.
EL SERVIDOR.-Pero, �infeliz!, justamente, ah� viene su hermano, otro hijo de
Carcino.
FILOCLE�N.-Con esto ya tendr� algo que llevarme a la boca.
EL SERVIDOR.-S�, pero todos ser�n cangrejos, porque ah� llega un tercer hijo
de Carcino.
FILOCLE�N.-�Y eso que se arrastra a tu lado, �es cangrejo o camarón?
BDELICLE�N.-Es un cangrejillo; el m�s peque�o de la familia, el que
compone tragedias.
FILOCLE�N.-�Oh Carcino, padre feliz de tan hermosa progenitura! �Qu�
bandada de reyezuelos se abate sobre m�! Fuerza, es, �ay triste!, que me bata con ellos.
Eh t�, prepara la salsa para com�rmelos, despu�s de la lucha.
EL CORO.-�Vamos, ilustres hijos de los mares! Saltad, hermanos de los
langostinos sobre la arena, al borde del mar que no se vendimia. Haced virar vuestros
pies r�pidos, alzad la pierna como Frinicos y los espectadores os mostrar�n su
admiración. Girad formando redondeles, golpeaos el vientre, convert�os en torbellinos.
Aqu� ten�is a vuestro padre, se�or y soberano de los mares, que avanza reptante,
orgulloso de sus hijos los tres reyezuelos de la danza. �Vamos! Guiadnos hacia la salida,
por favor, y a ritmo de paso ligero. Nunca se ha visto que la comedia concluya con un
"ballet".
86
Carcino era un mal poeta tr�gico, cuyos hijos ten�an peque�a estatura y ejecutaban danzas tr�gicas.
-30- [ Pobierz całość w formacie PDF ]

  • zanotowane.pl
  • doc.pisz.pl
  • pdf.pisz.pl
  • pruchnik.xlx.pl

  • Drogi uĚźytkowniku!

    W trosce o komfort korzystania z naszego serwisu chcemy dostarczać Ci coraz lepsze usługi. By móc to robić prosimy, abyś wyraził zgodę na dopasowanie treści marketingowych do Twoich zachowań w serwisie. Zgoda ta pozwoli nam częściowo finansować rozwój świadczonych usług.

    Pamiętaj, że dbamy o Twoją prywatność. Nie zwiększamy zakresu naszych uprawnień bez Twojej zgody. Zadbamy również o bezpieczeństwo Twoich danych. Wyrażoną zgodę możesz cofnąć w każdej chwili.

     Tak, zgadzam się na nadanie mi "cookie" i korzystanie z danych przez Administratora Serwisu i jego partnerĂłw w celu dopasowania treści do moich potrzeb. Przeczytałem(am) Politykę prywatności. Rozumiem ją i akceptuję.

     Tak, zgadzam się na przetwarzanie moich danych osobowych przez Administratora Serwisu i jego partnerĂłw w celu personalizowania wyświetlanych mi reklam i dostosowania do mnie prezentowanych treści marketingowych. Przeczytałem(am) Politykę prywatności. Rozumiem ją i akceptuję.

    Wyrażenie powyższych zgód jest dobrowolne i możesz je w dowolnym momencie wycofać poprzez opcję: "Twoje zgody", dostępnej w prawym, dolnym rogu strony lub poprzez usunięcie "cookies" w swojej przeglądarce dla powyżej strony, z tym, że wycofanie zgody nie będzie miało wpływu na zgodność z prawem przetwarzania na podstawie zgody, przed jej wycofaniem.